La Hipótesis Oceánica Marciana Choca con la Costa
Por :Heber Rizzo
Las fotografías de la superficie marciana no muestran signos de acantilados marinos a lo largo de una posible antigua línea costera.
Por: Redactor del Equipo de Astrobiology News.
Para probar la hipótesis de que los océanos cubrieron alguna vez la mayor parte del hemisferio norte de Marte, los científicos del Sistema de Ciencia Espacial Malin (MSSS por sus siglas en inglés) de San Diego, California, han utilizado imágenes de alta resolución de Marte tomadas por la Cámara Orbitadora Marciana (MOC por sus siglas en inglés) a bordo del Prospector Global Marciano (Mars Global Surveyor).
“La hipótesis oceánica es muy importante, ya que la existencia de grandes cuerpos de agua líquida en el pasado marciano tendría un impacto tremendo en el antiguo clima marciano y en las implicaciones para la búsqueda de evidencia de vida pasada en el planeta,” dice el Dr. Kenneth Edgett, un científico del equipo MSSS.
Algunos rasgos en anteriores sondas marcianas, en particular las asombrosas imágenes de los Viking, llevaron que un número de investigadores buscaran remanentes de antiguas líneas costeras y aumentaron la posibilidad de que un tal cuerpo de agua existiera alguna vez.
“Así que las cosas ahora, con respecto a los océanos,” dice el Dr. Michael Carr, de la Prospección Geológica de los EE.UU. (US Geological Survey), “están en una especie de limbo en este momento. He estudiado un montón de las imágenes del MOC en lugares donde se supone que estaban las líneas costeras, y no puedo encontrar ninguna evidencia. Se pueden ver algunos rasgos allí, pero afirmar que son o no líneas costeras, es algo difícil.”
Comenzando en 1998, los científicos del MSSS Michael Malin y Kenneth Edgett se dedicaron a responder esta cuestión con cámaras de alta resolución, de cinco a diez veces mejores que las del Viking. Inicialmente el equipo enfocó aproximadamente el dos por ciento de las imágenes del MOC en lugares donde se pudieran examinar líneas costeras propuestas por otros en la literatura científica.
Con la identificación visual de los investigadores en su más alta resolución, ninguna de esas características parecía estar formada por la acción del agua en un medioambiente costero. Sus análisis aparecieron inicialmente en las Cartas de Investigación Geofísica (Geophysical Research Letters), en un artículo titulado “Océanos o Mares en las Tierras Bajas Septentrionales de Marte: Exámenes de Imágenes de Alta Resolución de las Líneas Costeras Propuestas.”
Fueron analizadas catorce imágenes de áreas que habían sido indicadas, por las imágenes del Viking, como candidatos de líneas costeras. Si una muestra mayor de imágenes o si datos confirmatorios pueden llegar a aclarar la interpretación visual de las expectativas sobre cómo debe lucir una línea costera marciana, sigue siendo una conclusión científica lista para el debate. El Prospector Global Marciano lleva a bordo un instrumento llamado Altímetro Laser Orbitador de Marte (MOLA por sus siglas en inglés), que utiliza pulsos de láser infrarrojo para medir la superficie más abajo.
“Las imágenes del MOC que tomamos a fines de los ‘90 no muestran ninguna forma de tierras costeras en las áreas donde investigadores previos (trabajando con las imágenes de menor resolución del Viking) habían propuesto que eran líneas costeras.”
Según se presentó en el artículo de las Cartas de Investigación Geofísica, el análisis se focalizó en cuatro áreas diferentes que habían sido propuestas como líneas costeras. Una de esas áreas se encuentra al noroeste del gran volcán llamado Monte Olympus (Figura 3). Las imágenes Viking de un rasgo lineal separando el margen occidental de Lycus Suici de las más bajas y lisas planicies Amazonis (arriba a la izquierda en la Figura 4) llevaron a que algunos investigadores concluyeran que las dos superficies estaban en contacto a lo largo de un acantilado.
Previamente, ya que el acantilado propuesto mira hacia las planicies lisas, se sugirió que este rasgo podría ser la señal de un acantilado que se forma por la erosión provocada por las olas de un cuerpo de agua al romper sobre una línea costera.
Tres de las imágenes MOC se tomaron a lo largo de esta costa propuesta, cubriendo las áreas indicadas por los rectángulos blancos en la Figura 4. Cada imagen fue enfocada para montarse sobre el rasgo, una elevación que corre diagonalmente a través de la escena, desde cerca del borde inferior izquierdo hacia el superior derecho. La sección media de la imagen central, mostrada en la Figura 5, fue tomada en julio de 1998. Las tierras altas del Picus Suiza (mitad inferior) son de textura rugosa mientras que las planicies Amazonas (mitad superior) aparecen como más lisas.
Esta imagen en particular muestra que el contacto entre Amazonis y Lycus Suici claramente no es un acantilado cortado por las olas, y que no hay características que puedan ser identificadas definitivamente como formas costeras. “Pero lo que me molesta,” dice Carr, “es que a través de esta banda de latitud donde se están mapeando las líneas costeras oceánicas, la geología superficial es muy complicada. Hay muchas cosas allí. Se encuentra toda clase de morfología muy complicada.”
“Aún en la Tierra, la búsqueda de antiguas líneas costeras desde el aire o el espacio es todo un reto,” dice el Dr. Malin. “Pero, a pesar de las dificultades para identificar en forma remota antiguas líneas costeras, creemos que esas imágenes MOC de las costas propuestas tienen una resolución suficiente como para mostrar características indicativas de un medioambiente costero, si hubiera habido un antiguo océano en Marte.”
Los mares marcianos tendrían que haber sido influidos por solamente un tercio de la gravedad de los mares terrestres, y no habrían estado sujetos a poderosas fuerzas de marea, como las que provoca la Luna terrestres. A causa de la erosión activa de la Tierra, hay menos oportunidades de comparar una antigua costa marciana con una presente costa erosiva terrestre, según la forma que tal acantilado presentaría a una vista desde el espacio.
¿Qué sigue a continuación?
Mientras que la sugerencia de que alguna vez Marte tuvo océanos, no puede ser rechazada, los fundamentos de la “hipótesis oceánica” desarrollados en los ‘80 sobre la base de supuestas líneas costeras, parecen ahora requerir un examen más amplio de cualquier terreno aparentemente parecido a un frente de playa en Marte.
Sin embargo, debe comprenderse que existe más evidencia significativa de agua en Marte en el pasado, tanto del Prospector Global Marciano como de misiones previas. Para buscar claves sobre la muy importante cuestión del papel del agua en la evolución de Marte, el MOC continúa tomando nuevas fotografías de alta resolución.