Un estudio mide el impacto del ruido de los barcos sobre las ballenas jorobadas
Por :Covadonga Escandón Martínez
Las aguas de Pasaje Interior de Alaska estaban llenas de ruido. Zumban con sonidos de navíos, desde el ronroneo de los barcos pesqueros hasta el ruido sordo de los cruceros, además de los gruñidos, silbidos y chirridos de las ballenas jorobadas residentes
Ahora los investigadores de la Universidad de California (UC) Davis están escuchando, tratando de medir el impacto del ruido de los barcos sobre la comunicación vocal de estas ballenas en peligro de extinción mientras buscan comida en grupos. La investigadora sobre el comportamiento animal, Brenda McCowan y el estudiante de postgrado Sean Hanser recientemente han completado la primera fase de un estudio multi-anual.
Según McCowan, las ballenas jorobadas están entre los animales con mayor diversidad vocal en el mundo y dependen fuertemente de la comunicación vocal y de su habilidad auditiva para interactuar entre ellas y con su medio ambiente. “Las ballenas jorobadas hacen casi todos los sonidos en el reino animal. He escuchado sonidos como de elefantes y de leones. Hay muchos sonidos cuya función desconocemos”.
De particular interés para los investigadores es un tipo de comportamiento vocal consistente conocido como “llamados a comer”. McCowan dice que “Los llamados a comer podrían ayudar a acorralar peces o a coordinar a los miembros del grupo que se alimenta. Nuestra hipótesis trata de probar si estos animales realmente cambian la manera en que usan los llamados a comer para compensar el ruido”.
Los investigadores de la UC Davis están colaborando en el estudio con miembros de la Fundación para Ballenas de Alaska y el Instituto para la Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (SETI), quienes están interesados en técnicas de comunicación no-humanas.
Cada año, registrarán miles de grabaciones de los llamados de las ballenas en ausencia de ruido de navíos. Compararán esos llamados con grabaciones de vocalizaciones de ballenas hechas mientras se conducen barcos sistemáticamente a través de áreas en las que hay ballenas. Los investigadores también colocarán micrófonos submarinos en algunas ballenas para grabar muestras vocales individuales y experimentar el ruido desde la perspectiva de éstas.
Los investigadores esperan que si su estudio revela que hay un impacto del ruido de los barcos sobre el comportamiento de las ballenas, entonces sus estudios podrían ser usados para mejorar la convivencia entre ballenas y barcos. La información sobre cómo reaccionan las ballenas al ruido también podría ayudar a prevenir que se enreden en los aparejos de pesca y que choquen con barcos, fenómenos que se sabe tienen un impacto significativo sobre las poblaciones de ballenas. Las técnicas de los equipos para medir el impacto del ruido son potencialmente aplicables a otros animales, tanto dentro como fuera del medio ambiente marino.
El estudio costará unos $150 000 dólares americanos y estará fundado por la Fundación para Ballenas de Alaska, el Instituto (SETI) y la Fundación Nacional para la Pesca y la Vida Silvestre.
Información adicional:
Universidad de California, Davis
La Fundación Nacional para la Pesca y la Vida Silvestre
Fundación para Ballenas de Alaska