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Resumen (19 de Septiembre de 2005): El Hermano Guy Consolmagno, astrónomo del Vaticano, discute su punto de vista de la controversia sobre el diseño inteligente, así como los choques históricos entre ciencia y religión.

La Tierra vista por el Voyager mientras se aleja: un punto azul pálido. Crédito: NASA

Siempre ha habido algún conflicto entre ciencia y religión. Un ejemplo famoso fue cuando Galileo Galilei, por su apoyo a la noción copernicana de una Tierra orbitando el Sol, fue puesto bajo arresto domiciliario por la Iglesia católica. Un ejemplo más reciente ha sido visto en las aulas americanas – cuando el concepto religioso de diseño inteligente fue recomendado como una teoría alternativa viable para ser enseñada junto a la evolución darviniana, el hecho levantó en armas a la comunidad científica.

Astrobiology Magazine tuvo la oportunidad de discutir la batalla sobre el diseño inteligente con el Hermano Guy Consolmagno, una persona con un pie tanto el mundo científico como en el religioso. Como sacerdote jesuita y astrónomo del Vaticano, tiene una perspectiva única sobre lo que significa esta lucha entre ciencia y religión para la sociedad de hoy.

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Astrobiology Magazine (AM): Desde su perspectiva como sacerdote y científico, ¿cuales son sus puntos de vista sobre la reciente controversia sobre el diseño inteligente?

Guy Consolmagno (GC): El diseño inteligente es una de esas frases que significa algo diferente para cada uno. Para parte del mundo, es una frase clave del peor tipo de creacionismo. Y para otra gente, sólo significa que no se puede usar la ciencia como una forma de refutar la existencia de Dios (risas). Obviamente no se puede. Y tampoco se puede usar la ciencia para demostrar la existencia de Dios.

La ciencia tiene que empezar con una suposición. Los físicos newtonianos comenzaron con la suposición de que todo es debido a la causa y efecto. Y esto, vivir para ver, parece probar que todo es debido a la causa y efecto. Pero esto no es una prueba, es solamente recuperar tu suposición. La teoría cuántica dice que todo es casual. Y por Dios, se puede exponer que según la teoría cuántica, todo es azar. No, esto no lo prueba; es una suposición que permite manejarse en el universo. Se puede decir que el universo funciona de la forma que lo hace a causa de un creador benevolente – esa es una forma perfectamente razonable de comenzar a mirar el universo, pero no es una prueba. Es tu suposición.

El problema es que alguna gente cree que puede usar la ciencia para probar la existencia de Dios; eso hace a la ciencia más poderosa que a Dios. Esa es una mala teología. De hecho, algunos filósofos han dicho que es lo que condujo al ateismo en el siglo dieciocho – la falacia del Dios de las lagunas. Se dice, 'no tengo ni idea de cómo ha sucedido esto. Debe haber sido designio divino'. Y entonces cincuenta años después, alguien explica cómo sucedió, y dices 'Ya no necesito a Dios'. Si tu fe está basada en la ciencia, es un tipo de fe muy vacilante.

El Observatorio Vaticano, en Castel Gandolfo, Su biblioteca contiene más de 22 000 volúmenes y posee una valiosa colección de libros antiguos que incluyen trabajos de Copérnico, Galileo, Newton, Kepler, Brahe, Clavio y Secchi. Crédito: Arizona U./Vatican Observatory

Mi creencia en Dios no es debida a algo que haya visto en la ciencia. Pero puedo darle la vuelta a esto y decir, 'creo en la ciencia a causa de mi fe en Dios'.

Si usted va a ser científico, hay tres cosas que tiene que creer. Número uno, el universo existe realmente – no soy sólo el sueño de una mariposa, soy un científico. Dos, tienes que creer que el universo tiene sentido. No es caótico; realmente hay leyes fundamentales y nosotros somos capaces de descubrirlas. Y lo tercero y más difícil, la más religiosa de las creencias, es que tienes que creer que vale la pena hacerlo.

Si su religión dice que el sentido de la vida es meditar sobre este universo corrupto y alcanzar el espiritual, usted no va a ser un científico. Hay muchas grandes culturas en Oriente que tuvieron grandiosas matemáticas, filosofía y ética, pero nunca hicieron ciencia natural por que no podían entender el sentido de gastar su tiempo y dinero en esto.

El occidente, con el judaísmo, el Islam y la cristiandad, aceptó la idea de un Dios creador que miró el universo y dijo 'Esto es bueno'. La cristiandad incluso va tan lejos como para decir que Dios amaba tanto el universo que encarnó a su único hijo engendrado, como dice la frase. No dice que Dios amara a la gente tanto que enviara a su hijo, sino que Dios amaba al mundo.

Si el universo es tan bueno, entonces merece la pena gastar el tiempo y dinero estudiándolo, incluso si no me va a hacer rico, incluso si no me va a dar inmediatamente mejores cosechas o un teflón más fantástico o cualquiera de esas otras excusas. Esa la motivación del por qué todos estamos aquí haciendo las cosas. Es porque estamos enamorados de la verdad, es porque amamos el universo físico, y nuestro amor al universo es lo que nos da el coraje para gastar nuestras vidas estudiándolo. Por lo tanto, nuestra ciencia está basada en nuestra religión. No puede hacerse al revés.

El número de estrellas en el universo visible se estima en diez veces más que el número de granos de arena en la Tierra y once veces el número de copas de agua en todos los océanos de la Tierra – unos 70 sextillones, o 70.000.000.000. 000.000.000.000 (siete seguido por 22 ceros). Crédito: NASA/STScI/ESA

AM: Una de las ideas tras el diseño inteligente es que en la naturaleza podría haber formas ideales. Por ejemplo, un ojo de pulpo y un ojo humano que terminan siendo tan similares aun tomando caminos diferentes para llegar ahí. ¿Cree que este concepto de convergencia está más en sintonía con el pensamiento religioso que otros aspectos de la teoría evolutiva?

GC: No, no creo que el pensamiento religioso le ofrezca nada en cualquiera de esos caminos.

AM: ¿Aun cuando sugiere un ideal platónico, o un ideal impuesto por Dios, de que hay una forma o diseño perfecto ahí fuera?

GC: Pero yo no estoy convencido de eso. Otros ojos en algún otro lugar del planeta pueden funcionar de una forma muy diferente, e incluso puede que resueltos con un diseño mejor. Nosotros no estamos en posición para decirlo.

AM: Se van a encontrar diferentes formas en planetas diferentes, ya que se van a dar condiciones ambientales diferentes.

GC: Incluso si las condiciones son las mismas, podría haber formas que ni siquiera hemos imaginado. El problema con esta idea de 'la huella dactilar de Dios' es que, en primer lugar, niega el hecho de que TODO es la huella. Y por tanto, no quiero decir que esto sea una prueba de Dios, sino que allí hubo sólo un accidente.

Usted tampoco quiere negar la libertad humana. Si dice que todo es un diseño divino, entonces ¿qué hay sobre el demonio en el mundo?. Bien, podría contestarme que el demonio surge de la libertad humana. Pero entonces, ¿qué hay sobre los tsunamis en el mundo?. ¿Donde traza usted la línea?. En algún punto, Dios proyectó las cosas. En algún punto, Dios da al universo libertad para hacer lo que va a hacer. Hay una línea – y no se donde se encuentra – pero si va usted a creer en la libertad humana y no en la predestinación, entonces tiene que creer que hay una gran parte del universo que Dios permite, más que controla.

AM:¿Se refiere usted a la idea del Relojero Ciego – que Dios creó el universo y simplemente se sentó y lo deja funcionar?

No me gusta mucho esa analogía, por que creo que ha tenido muchas incorporaciones posteriores. Yo sólo quiero volver atrás y no hacer ningún juicio. Mi religión me dice que Dios creó el universo, y que merece ser estudiado. Ahora depende de mi ciencia decirme lo que éste puede hacer.

AM: ¿Que piensa de la idea de que puede haber múltiples universos con leyes diferentes que los gobiernan de una forma bastante darviniana, cada uno habiendo evolucionado a partir de unas condiciones iniciales?

GC: Bueno, no es de una forma muy darviniana, es más de una forma muy tomista. Tomás de Aquino habla de múltiples mundos, que es realmente lo que son múltiples universos. Los teólogos medievales estudiaron este tema. Y a fin de cuentas, nunca ganarás si apuestas a que Dios no podría hacer algo.

Científicamente, debe usted preguntarse, ¿qué me aporta esta teoría?. ¿A dónde me lleva que no hubiera estado antes?. Hay un horizonte que no podemos ver – si se hace cosmología, debe admitirse la posibilidad de cosas más allá del horizonte de la velocidad de la luz.

Si se está intentando ir en contra del principio antrópico puede proponerse como un ejemplo de antagonismo. Pero francamente el principio antrópico no es ciencia, es filosofía, y no una filosofía particularmente interesante en lo que a mi concierne. Por tanto no estoy interesado en ello, ni de una forma ni de otra. Si hay una ciencia divertida que surge de él, entonces puede tratarlo como ciencia. Si es ciencia ficción, trátelo como ciencia ficción. Eso está bien, me gusta la ciencia ficción. Solamente no confundo las dos.

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El Dr. Consolmagno ganó su licenciatura en ciencias en 1974 y la especialidad en ciencias en 1975 en Ciencias Terrestres y Planetarias en el Instituto de Tecnología de Massachusetts , y su doctorado en Ciencias Planetarias en la Universidad de Arizona en 1978. Desde 1978-80 fue becario post doctoral y catedrático en el Observatorio del Harvard College , y desde 1980-1983 continuó como post doctorado y catedrático en el MIT. También ha estado varios periodos como científico visitante en el Centro de Vuelo Espacial Goddard y como profesor visitante en el Loyola College, Baltimore, u en la Universidad Loyola, Chicago. Las opiniones expresadas en este artículo no son necesariamente las del equipo editorial o sus patrocinadores.