En un caso singular, como choque de coches, dos piezas de hardware de cohete han colisionado por encima de la atmósfera de la Tierra. El alcance orbital involucró al cuerpo de un cohete de los Estados Unidos de hace 31 años y a un fragmento de un cohete Chino lanzado más recientemente.



La colisión ocurrió el 17 de Enero de este año, a unos 885 kilómetros de altura sobre la Tierra (unas 550 millas) Esa área denominada área de órbita baja de la Tierra o como se le conoce en inglés, LEO (low Earth orbit), tiene una media de densidad por encima de la superior. Estas piezas de escombro orbitaban el espacio en órbitas muy similares en el momento del alcance final.

La Red de Supervisión de los Estados Unidos, para la vigilancia de equipos en el espacio detectó el choque, reportándolo en la edición de Abril de Orbital Debris Quarterly News, una publicación de la Oficina de Programas de Desechos espaciales en órbita de la NASA en el Centro Espacial Jonson en Houston, Texas.

Ligeramente desviados

Los objetos involucrados en el choque fueron un quemador del cohete Thor de U.S. de la segunda fase, utilizado para colocar en órbita a un satélite en el año 1974 y la otra pieza fue un fragmento de la tercera etapa de un vehículo de lanzamiento Chino CZ-4 que explotó en Marzo del 2000.

Cuando los objetos chocaron el uno con el otro, el análisis indica que las órbitas de ambos se encontraban ligeramente desviadas, a la vez que tres trozos más de desecho – suficientemente grandes como para haber sido detectados – fueron expulsados del cuerpo del cohete americano.

El Orbital Debris Quarterly News también reporta otro accidente de colisión.
Este otro había sucedido a finales de Diciembre de 1991. En este caso, un satélite Ruso de navegación ya inoperante, Cosmos 1934, tuvo un encuentro con un trozo de escombro de una nave de la misma familia, Cosmos 926. Este evento se reconoció recientemente cuando los especialistas de la Red de Vigilancia estaban examinando datos históricos de rastreo. También se produjeron escombros de este choque, pero los fragmentos fueron demasiado pequeños para poder seguirles la pista.


Nota de seriedad

Como se hace notar en las noticias de la NASA sobre escombros espaciales, el primer choque frontal reconocido entre objetos catalogados de diferentes misiones, involucró una nave espacial en operaciones y el fragmento de la etapa superior de lanzamiento de un vehículo que sufrió una separación después de la misión. En ese evento – que sucedió el 26 de Julio de 1996 – la nave espacial francesa CERISE chocó con un fragmento de la tercera etapa de un cohete de lanzamiento Ariane 1, que había explotado diez años antes.

Mirando hacia el futuro, la edición de Orbital Debris Quarterly News,agrega este serio aviso:
"A medida que el número de objetos en órbita alrededor de la Tierra aumenta, la posibilidad de choques accidentales va también en aumento. En la actualidad, cientos de acercamientos… entre objetos catalogados ocurren todos los días. Si las futuras naves espaciales y cuerpos de cohetes no son removidos de la LEO, en un lapso de tiempo moderado, después de la misión, digamos unos 25 años, el índice de colisiones accidentales aumentará considerablemente más adelante en este siglo”.

Nota del traductor: Es muy posible que las observaciones recientes y más que puedan existir en los próximos meses, de supuestos meteoritos o bolas de fuego que cruzan por encima de diversas regiones en nuestro planeta, puedan tratarse de este tipo de escombros que entran en la capa de la atmósfera donde se inflaman, se queman y finalmente caen al suelo, con el consecuente pensamiento que pueda tratarse de un objeto celeste, sin necesariamente serlo

Artículo de Leonard David - Space.com
Aportación deLiberto