Dos astronautas tuvieron que regresar antes de tiempo a la Estación Espacial Internacional tras dejarla vacía por primera vez en cinco años.




Ambos tripulantes, el cosmonauta ruso Alexander Kaleri y el astronauta estadounidense Michael Foale, estaban realizando una caminata espacial cuando observaron un problema en uno de los trajes.

Por ello se decidió que la caminata de varias horas debía ser recortada.

Los controladores de la misión en Houston y Moscú estuvieron al mando de la estación mientras ésta estuvo vacía.

Sólo tres horas

El comandante estadounidense y el ingeniero de vuelo ruso estuvieron tres horas en su misión de llevar a cabo experimentos y realizar mantenimiento de rutina cuando se observó un problema en el control de la temperatura en el traje espacial de Kaleri.

"Está extrañamente húmedo", dijo el cosmonauta a los controladores.

Minutos después señaló: "Es increíble. Tengo lluvia dentro del casco, tengo agua en el visor".

Ambos hombres regresaron seguros al módulo ruso Zvezda tras estar la mitad del tiempo programado en el espacio exterior.

La rutina en la Estación Espacial Internacional señala que dos tripulantes deben salir juntos en una caminata espacial con el fin de que uno "cuide" al otro. Usualmente un tercero permanece en la estación o en un trasbordador acoplado a ella para vigilarlos de cerca.

Sin embargo, tras el accidente del Columbia, tal operación resulta imposible.

Por ello, Estados Unidos se opuso a tales caminatas ya que la estación premanecería sola. Sin embargo, Rusia insistió en que la rutina podía llevarse a cabo sin inconvenientes.