Ante la posibilidad de colisión entre la Tierra y un asteroide en 2029, la fundación B612 ha pedido información a la NASA sobre los planes que tiene si la probabilidad aumenta.

La NASA ha desarrollado planes para enfrentarse con un asteroide de casi medio kilómetro de ancho, cuya trayectoria creen los astrónomos que está cercana a una colisión con la Tierra. La agencia afirma que, por el momento, no es necesario enviar un radiotransmisor al asteroide, pero, añaden, mantendrán una vigilancia estricta sobre las evoluciones de la roca por todo el sistema solar.

Los fans de Stargate estarán, sin duda, encantados, ya que el asteroide, al que antes se llamaba 2004MN4, ha sido renombrado como 99942 Apofis.

Si las estimaciones actuales son correctas, el asteroide esquivará nuestro planeta por sólo unos cientos de miles de kilómetros en algún momento de 2029. Aunque, en términos cotidianos, es una distancia para nosotros extraordinaria, a escala astronómica es una distancia ínfima.

Además, la cercanía del encuentro será, probablemente, tan estrecha, que la interacción gravitatoria entre el asteroide y la Tierra podría alterar la órbita prevista de la roca, lo cual aumentaría la probabilidad de que nos golpeara siete años después, en 2036.

Si nos alcanzase, los daños sería cuantiosos, aunque no fatales a escala planetaria. Si se estrella contra una ciudad, no dejaría mucha vida urbana tras él, y si cae en el mar, desencadenaría un tsunami que podría ser muy destructivo.

La agencia espacial afirma que si el asteroide representa un peligro todavía en 2013, empezarán a trabajar en una misión que visite Apofis con una sonda en 2019, y seguidamente intentarán desviar el asteroide en algun momento entre 2024 y 2028.

También consideran que planear y llevar a cabo una misión de desvío llevaría sólo siete años desde el principio hasta el final, y no los 12 que ha sugerido la Fundación B612. Ésto haría innecesario marcar el asteroide con un radiotransmisor antes de 2021, momento en el que habría que tomar la decisión de desviarlo, debido a que los científicos ya deberían tener en ese momento una idea muy detallada de la ruta que Apofis vaya a tomar.

La misión "Deep Impact" podría servir como modelo para el intento de desvío, aunque seguramente el impactor tendría que ser considerablemente más masivo que el montón de cobre de 300 kg. de esa misión.

Los planes de la NASA han sido sacados a la luz por la fundación B612, un grupo de activistas que buscan una mayor implicación del gobierno en la previsión de amenzas por parte de objetos cercanos a la Tierra. En junio de este año preguntaron a la NASA si era necesario marcar a Apofis con un transpondedor, y qué era lo que la NASA haría si, en efecto, el asteroide se convertía en un peligro grave para la tierra.

La fundación B612 afirma que, si bien dan por buenas las respuestas de la NASA a sus preguntas, si ellos no las hubieran planteado "no hubieramos llegado a tener el conocimiento actual sobre las circunstancias que rodean a Apofis, y ese no es un escenario que podamos permitirnos".


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